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MONOTEÍSMO Y POLITEÍSMO. REFLEXIONES
Algunas viejas discusiones teológicas, se plantean en base al monoteísmo
o politeísmo. O a la inmanencia o no de Dios. Ambas discusiones nos
parecen absurdas, ya que miran aspectos de la misma cosa. Y sabemos
además que todas las religiones tradicionales poseen el mismo mensaje de
fondo, y las aparentes contradicciones son sólo de forma. Al respecto,
invitamos a leer “la Filosofía Perenne”, de Aldus Huxley. En este caso,
intentamos afirmar que Dios está dentro de cada cosa: ¿es entonces
inmanente?. Si está en cada cosa, está en mí y está en ti, por tanto al
estar en ti también esta fuera de mi. Es decir, está dentro y afuera
porque simplemente está en todas partes. La discusión sobre la
inmanencia o no de Dios entonces es absurda porque él está en todas
partes. Pero el punto de contacto, de comunicación con ÉL, está dentro
de cada uno. Esto afirman estas frases de distintos orígenes culturales,
como la India, China, y el cristianismo de origen hebreo.
“No podrá decirse: helo aquí, helo allá: el reino de los Cielos está
entre vosotros”.
Lucas XVII; 21
“¿No sabéis que sois templo de Dios, y que el Espíritu de Dios mora en
vosotros?. Si alguno destruyere el templo de Dios, Dios le destruirá a
él; porque el templo de Dios, el cual sois vosotros, santo es”.
Corintios III; 16, 17.
“No preguntéis si el principio está en esto o aquello. Está en todos los
seres. Por eso se le dan apelativos de grande, supremo, íntegro,
universal, total... Está en todos los seres, por una terminación de
norma –el punto central o invariable medio- pero no es idéntico a los
seres, pues ni está diversificado –en la multiplicidad- ni limitado”.
Taoísmo, Chuang Tsé, cap. XXII
“En el centro de todas las cosas y superiores a todas, está la acción
productora del Principio Supremo”.
Taoísmo, Chuang Tsé, cap. XI.
“Este Atman –el espíritu divino- que reside en el corazón, es más
pequeño que un grano de arroz, más pequeño que un grano de cebada, más
pequeño que un grano de mostaza, más pequeño que un grano de mijo, más
pequeño que el germen que está en un grano de mijo, este Atman, que
reside en el corazón, es también más grande que la tierra, más grande
que la atmósfera, más grande que el cielo, más grande que todos los
mundos en conjunto”.
Chhandogya- Upanishad, Papathaka 3º, Khanda 14ª -India-
“Semejante es el Reino de los Cielos a un grano de mostaza, que
tomándolo un hombre lo sembró en su campo; el cual es la más pequeña de
todas las semillas, más cuando se ha desarrollado es mayor que las
hortalizas y se hace un árbol, de modo que vienen las aves del cielo y
anidan en sus ramas”.
San Mateo, XIII; 31, 32.
San Marcos, IV; 30, 32.
San Lucas, XIII; 18,19. |
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