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La religión
Las
organizaciones religiosas suelen ser estructuras dogmáticas, autoritarias,
machistas y jerárquicas tanto por su ideología, por su estructura interna,
como por su actuación. Las sectas y las religiones constituyen una pieza
esencial del Sistema, pues adoctrinan a la humanidad y consolidan el
principio de autoridad.
Las organizaciones religiosas transmiten las ideas de
incapacidad humana y la sumisión que esa desvalorización conlleva. La misma
idea de dios, de un ser creador del mundo que lo gobierna convenientemente
desde un “lugar” trascendente o inmanente, según la necesidad, lleva
implícita la justificación de todo lo que existe y la necesidad del dogma y
de la autoridad. Por esto, cualquier tipo de religión o de secta es
incompatible con la libertad y la espiritualidad. Las ideas religiosas que
expresan la incapacidad humana y la existencia de un ser superior se
traducen, en las mentalidades, en la religiosidad y en el doctrinarismo. Y
esto termina siempre en la sumisión a dios y a quienes hablan en su nombre.
El ámbito sexual y social se materializa en la defensa del orden patriarcal,
que somete a la mujer y a los hijos del hombre, al que reduce a su rol de
dominador, que reprime la sexualidad de todos, contamina las relaciones
sociales y estructura la sociedad en torno a un concepto expresamente
limitado de “familia”. Y respecto al terreno político y económico, las
sectas y religiones suelen bendecir al sistema de opresión imperante.
Para llevar a cabo su labor adoctrinadora, las sectas y
las organizaciones religiosas se valen de cuantiosos y diversos medios.
Poseen medios de comunicación propios que transmiten los valores religiosos,
difunden las actividades de instituciones y organizaciones religiosas y
realizan valoraciones bajo su prisma ideológico, creando opinión en los
medios de comunicación ajenos. Muchas de estas organizaciones suelen
disfrutar de un reconocimiento que les permite, a través de sus gabinetes de
prensa, tener presencia y un trato condescendiente en medios “laicos”.
El sistema educativo ha sido siempre un instrumento
adoctrinador utilizado por estas organizaciones religiosas. En algunos
países y sociedades, perdido el monopolio de tiempos pasados, siguen
conservando un buen porcentaje de alumnos en sus escuelas privadas, sobre
todo en las consideradas de élite, y siguen usando la educación para
adoctrinar a niños y a jóvenes. El sistema educativo es otra área desde
donde se manipula y controla a las personas. La mayor parte de lo que se
enseña son embustes y materia que no tiene sentido práctico en la vida pero
que, de diferentes maneras, apoya el sistema establecido por el Poder. El
ser humano trabaja mucho, pide créditos y paga para aprender algo que es
anticuado e inadecuado, y esto ocurre en todos los sectores -filosófico,
humanidades, científico, matemático, psicológico, médico, etc.
Para consolidar su implantación y llevar a cabo su
cometido, estas organizaciones se sirven de otros medios, como la extensa
red de lugares de reunión, donde practicar la liturgia, que cubren la
práctica totalidad de los territorios estatales. El sacerdote sigue estando
en el púlpito -aunque no físicamente- y en el confesionario sigue dirigiendo
pensamientos y conductas, creando opinión y canalizando actuaciones.
Numerosos grupos religiosos de toda índole, más o menos
disfrazados, llevan el mensaje doctrinario allá por donde van, en las
excursiones, en los movimientos sociales, en las actividades culturales, en
las obras benéficas… Pretenden ser la cara simpática de los que bendicen a
la autoridad y al Poder.
Otro medio eficaz para adoctrinar son la tradición y los
ritos. El hecho de no cuestionar las costumbres del pasado ha facilitado el
que las sectas y las religiones, a través de sus ritos, esté presente en la
vida de las personas, tanto en los ciclos anuales como en las ocasiones más
importantes de la vida de las personas -nacimiento, adolescencia, unión de
las parejas, enfermedad grave y fallecimiento.
Tantos medios no pueden dejar de tener resultado. La
sociedad está impregnada de una falsa e interesada religiosidad, con lo que
el Poder y su autoridad y quedan muy reforzados.
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