|
TIEMPOS CRÍTICOS
Vivimos tiempos críticos para la humanidad, donde pareciera existir un
caos, las sombras y la desesperanza, como si no hubiese otra forma de
vida, sin otro tipo de salida. Hasta aparecen nuevos modos de pensar
limitativos, intelectuales, pues dicen que hemos llegado al fin de la
historia; este raciocinio implica el congelamiento de toda evolución,
como si quisiesen imponernos el código de los códigos, la gran
limitación: hay que conformarse, no existe otra salida.
El ser humano es parte de la Luz, posee un don, el de la opción; la vida
misma es un milagro, es la creación del movimiento constante, cambio y
transformación, evolucionando siempre hacia estados superiores. Más
también son tiempos donde lo hermético deja de serlo, el misterio es
desvelado, surge con toda la Luz La Alternativa, ella nos sugiere,
respetando el libre albedrío, el sendero: el reconocimiento de las Leyes
Universales integrándolas en una actitud amorosa hacia la evolución.
La comprensión y la praxis, traerán aparejado el bienestar, tanto físico
como álmico, y desde el Yo Soy, el espíritu comenzará a emerger soltando
amarras, al liberarse de códigos y personajes, será el empezar a
entenderse, reconocerse; interpretar y desarrollar la vida sin
frustraciones ni miedos, esos fantasmas bloqueadores de nuestro
crecimiento en lo espiritual y en lo material. Este es el tesoro de las
revelaciones dadas por estas leyes; es la antorcha encendida de la
sabiduría ancestral sugiriendo como siempre el camino a seguir. De forma
simple y sensible podremos transformarnos, aprenderemos a ser
alquimistas, cambiando lo negativo en positivo; manteniendo así
encendido el Sol de nuestra lámpara interior; ésta lámpara es la
atención, la acción atenta desde nuestro Yo Soy Verdadero.
Desde el amor y la humildad, haciendo el trabajo interior en cada día de
nuestras vidas, ejercitando estas leyes universales, primero en nosotros
mismos, sintiendo y viviendo de acuerdo a ellas, en una actitud
coherente con esta nueva forma de entender la vida, lograremos el
milagro.
Son tiempos de despertares, de tomar conciencia, prestando suma
atención, haciendo emerger cotidianamente al héroe y la heroína que
todos tenemos adentro, actitud necesaria para llegar al verdadero
entendimiento, a un claro discernimiento y asumir la realidad interior,
por esta vía lograremos conocer qué es la vida, el por qué y
fundamentalmente el para qué de ella.
En resumidas cuentas, nos daremos cuenta que... lo verdaderamente
valioso de la vida no se puede comprar con ninguna moneda. |
|