LAS VIRTUDES
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Las virtudes son como bellas flores que adornan tu personalidad.
· La
sangre se hereda. La virtud se conquista.
· Las
virtudes que se ostentan son vanas y falsas virtudes.
· La
virtud no vive en soledad, pronto se le acercan vecinos.
· La
virtud es inseparable de la dicha.
· No
podemos ver a la virtud sin amarla.
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Serás tanto más libre cuantas más virtudes desarrolles.
· Eso
que llamas tu mala suerte, ¿no será que te faltan virtudes?
·
Nuestras virtudes son a menudo hijas de nuestros vicios. Hijas del esfuerzo
que nos costó superarlos.
· No
reconocerás tus defectos y empezarás a transformarlos si no tienes una
mínima dosis de humildad.
· Las
personas en exceso "virtuosas" desacreditan a la virtud.
· Es
el hombre quien debe desarrollar su virtud, no la virtud al hombre.
· La
virtud es el punto medio entre dos vicios opuestos. Así, la valentía es el
punto medio entre la temeridad y la cobardía.
· La
virtud lleva la recompensa en sí misma.
· La
virtud no consiste en abstenerse del vicio, sino en no desearlo.
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Para llegar al conocimiento de la verdad sólo hay un camino: el de la
humildad.
· Un
gramo de humildad vale más que una tonelada de honores.
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Cuanto más grandes somos en humildad más cerca estamos de la grandeza.
· La
humildad es la reina de las virtudes. Es la luz que disipa las tinieblas
esparcidas por el orgullo y la soberbia. Es el bálsamo que dulcifica las
amarguras y pesares de la vida.
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Comprobarás tu grandeza cuando sepas sobreponerte sin esfuerzo a las grandes
humillaciones.
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Sólo al orgullo le hunde la humillación.
· La
única forma de no exponerse a sufrir una humillación es preveerla.
· El
buen humor es un deber que tenemos para con nuestros prójimos y semejantes.
· La
función química del humor es ésta: cambiar el carácter de nuestros
pensamientos.
· El
buen humor, con frecuencia, es hijo de la humildad y la modestia.
· Sencillez en el hablar, en el vestir, en todos tus modales.
· Las
verdades profundas siempre pueden expresarse de un modo sencillo.
· Es
curioso observar cómo casi todos los hombres que valen mucho son de maneras
sencillas y que casi siempre las maneras sencillas son tomadas por indicio
de poco valor.
· De
las hermanas del Amor, una de las más bellas es la piedad. Desarrollarás la
piedad cuando adquieras la capacidad de meterte dentro de la piel del otro.
· Lo
que la lluvia es para el fuego, lo es la piedad para la cólera.
· Una
piedad sin límites para todos los seres vivos es la prueba más firme y más
segura de la conducta moral interior y propia.
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Difícilmente yerra la persona moderada.
· Has
de aprender a usar de todo con moderación y sobriedad.
·
Rechazar las alabanzas, la mayoría de veces, es un deseo de ser alabado dos
veces.
· La
modestia es al mérito lo que las sombras a las figuras de una cuadro. Les da
relieve.
· ¿Tú
te consideras modesto? No te creía tan orgulloso.
· Si
la hipocresía muriera, la modestia debería ponerse, por lo menos, de medio
luto.
· Sé
modesto. Piensa que todavía te queda mucho por aprender.
· La
modestia sola es capaz de desarmar la envidia, que por lo común hace a los
hombres injustos.
· La
vanidad es el amor propio al descubierto.
· La
falsa modestia no es otra cosa que el orgullo disfrazado.
· Sé
generoso. Hay que haber sido pobre para apreciar la dicha de dar.
· El
que más da es el que más adquiere.
· Más
que en dar la generosidad consiste en enseñar a cómo ser y tener.
· La
discreción es la virtud sin la cual todas las demás dejan de serlo.
· Sé
discreto. El día tiene ojos. La noche tiene mil orejas.
· La
mejor disciplina se llama autodisciplina.
· La
templanza es el vigor del alma.
· La
confianza en sí mismo es el secreto del éxito.
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Generalmente ganamos la confianza de aquellos en quienes ponemos la nuestra.
· Sé
justo antes de ser generoso. Sé humano antes de ser justo.
· Sin
piedad la justicia se torna en crueldad. Y la piedad sin justicia en
debilidad.
·
Donde no hay libertad no hay justicia, y donde no hay justicia no puede
haber libertad.
· Es
bastante más fácil ser caritativo que justo.
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Muchas personas intentan ser buenos porque no saben ser justos.
·
Donde no hay esperanza no puede haber esfuerzo.
· La
esperanza deja de ser felicidad cuando va acompañada de la impaciencia.
·
Basta la más pequeña partícula de esperanza para engendrar un gran amor.
· La
esperanza es un préstamo hecho a la felicidad.
· La
limpieza es para el cuerpo lo que la pureza es para el alma.
· Por
lo general el limpio de cuerpo también lo es de alma.
· Con
orden y tiempo se encuentra el secreto de hacerlo todo y hacerlo bien.
· En
el trato con los demás, la comprensión, el respeto y la tolerancia deben ser
la expresión del desarrollo progresivo de la virtud en ti.
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