CAUSAS
DEL TRASTORNO ALIMENTARIO
El inicio
de un trastorno alimentario siempre es debido a un cambio en la persona o en el
entorno de la misma que le induce, en mayor o menor medida, a afrontarlo
refugiándose en ese aspecto de su vida. Estos cambios pueden estar generados
por:
• El
despertar a la pubertad. En esta etapa el cuerpo suele experimentar diversas
transformaciones. Estas pueden generar rechazo. Los comentarios que pueden
suscitar estos cambios, en algunas ocasiones jocosos o incluso hechos con
cariño, «vaya caderas que estás echando», pueden ser percibidos por la persona
como humillantes.
•
Incitación a la pérdida de peso: «Vaya, cómo te estás poniendo», «con ese peso
no te va a querer nadie», «si no pones fuerza de voluntad para controlar lo que
comes, no llegarás a nada en la vida», «si adelgazaras, seguro que me gustabas
más».
• El
comienzo de la edad adulta, el estrés de los exámenes, de una entrevista de
trabajo, la decisión del futuro profesional, asunción de responsabilidades
nuevas.
• El
matrimonio, que exige responsabilizarse de una nueva familia y, por tanto, de la
alimentación de la misma.
• El
embarazo, que obliga a afrontar una transformación corporal que si la paciente
ha tenido el trastorno larvado, haga que salga a la luz.
• El
divorcio. En ocasiones se encubre el dolor de la ruptura controlando la
alimentación, o desfogándose con la misma.
• La
pérdida de trabajo. Palian la frustración refugiándose en la comida.
• El
continuar durante un largo periodo de tiempo una dieta alimentaria sin control
facultativo (sin haber tenido ninguna causa de las anteriores para haber
iniciado dicha dieta).
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