Todas
las formas de expresión y comunicación humanas revelan en mayor o menor medida
la personalidad y estado de ánimo de la persona que las produce. Los gestos, la
forma de andar, de hablar, etc., pueden aportar muchos datos sobre la psicología
individual. También la forma de escribir nos puede orientar sobre algunas
peculiaridades psicológicas de una persona. La grafología es la ciencia que
estudia las relaciones entre la escritura y la psicología. A la hora de analizar
un escrito desde el punto de vista grafológico se deben o pueden valorar los
siguientes parámetros:
A)
Presentación del escrito. Hay que valorar su aspecto general, ya que un aspecto
limpio y ordenado no es igual que una escritura desordenada, sucia y confusa. En
el primer caso suele tratarse de personas ordenadas, con respeto hacia las
normas sociales. En el segundo, hay que pensar en impulsividad, indiferencia,
falta de previsión o de sentido de la organización.
B)
Márgenes. Cuando son muy regulares indican orden, autocontrol y disciplina. Un
margen izquierdo ancho indica espontaneidad y generosidad; si es estrecho y se
asocia con escritura apretada puede indicar tacañería o que se tiene una
personalidad interesada. Un margen izquierdo que se va haciendo más amplio a lo
largo del escrito sugiere generosidad y extraversión. Por el contrario, un
margen derecho amplio indica introversión y desconfianza en el futuro. Cuando
este margen es muy estrecho denota una gran vitalidad, espontaneidad y
sociabilidad.
C)
Espacios entre líneas y palabras. Una escritura muy espaciada, tanto en lo que
se refiere a palabras como a líneas sugiere tendencia a la introversión y
aislamiento, falta de espontaneidad y timidez. Si los espacios son muy
desiguales indica inestabilidad y falta de concentración, y si son regulares,
orden y estabilidad emocional. Una escritura apretada denota egoísmo,
inseguridad, timidez.
D) Tamaño
de las letras. La escritura de letras muy grandes es propia de personas que
valoran exageradamente sus propias facultades. También pueden indicar
insatisfacción y falta de respeto por las opiniones de los demás. Si el tamaño
de las letras es grande, pero no tanto, sugiere autoritarismo, afán de
independencia y ambición. Un tamaño intermedio denota equilibrio emocional. La
utilización de letras pequeñas denota modestia, introversión, facilidad para
adaptarse a situaciones nuevas. Si la letra es exageradamente pequeña, sugiere
falta de vitalidad, introversión y egoísmo. Cuando la altura de las letras no es
uniforme, indica que se puede tratar de una persona exageradamente sensible.
E)
Inclinación de las letras. Si la mayoría de las letras se hallan inclinadas
hacia la izquierda significa egoísmo, egocentrismo, introversión y dificultades
de adaptación. Si, por el contrario, se inclinan hacia la derecha, extraversión,
sociabilidad, inteligencia práctica. La escritura vertical, sin inclinación
hacia ningún lado sugiere estabilidad emocional, autocontrol, moderación.
F)
Inclinación de las líneas. Si lo están hacia arriba, indica optimismo cara al
futuro, vitalidad, ambición. Si lo están hacia abajo, pesimismo, tristeza,
agotamiento. La escritura de líneas muy horizontales, sin apenas inclinación,
sugiere autocontrol y equilibrio psicológico.
G)
Presión de la escritura. Una presión marcada es síntoma de vitalidad, energía,
combatividad. Una presión intermedia indica delicadeza y equilibrio emocional.
La falta de presión es síntoma de escasa iniciativa, falta de vitalidad, pereza,
desinterés y falta de voluntad.
H) Ritmo
de la escritura. La velocidad con que se realizan los trazos grafológicos puede
variar en función de las condiciones en las que se ha llevado a cabo la
escritura, pero en términos generales, una escritura rápida indica vitalidad,
agilidad intelectual, dinamismo e impulsividad. La escritura lenta sugiere
calma, pasividad, reflexión o falta de energía.
I)
Enlaces entre letras. Letras totalmente separadas unas de otras son propias de
personas muy intuitivas, observadoras, analíticas, pero con poco sentido
práctico. Letras totalmente enlazadas dentro de la misma palabra son síntoma de
racionalismo, lógica, sentido práctico. Una cantidad intermedia de enlaces entre
los dos casos anteriores, es decir, varias letras enlazadas dentro de cada
palabra sin llegar a unir ésta por completo, indica independencia, personalidad
propia, criterios propios.
l)
Peculiaridades de cada letra. La forma de cada letra puede tener una
significación especial y puede constituir por sí misma una importante fuente de
información. Por ejemplo, las letras «m» o «n» invertidas en forma de «u»
indican delicadeza, amabilidad, dulzura, cortesía y femeneidad. Si la parte
inferior de la letra «g» es muy amplia y ancha indica un nivel alto de erotismo,
etc.
En
términos generales, el aspecto global de la escritura nos orientará hacia la
personalidad del que la ha escrito. Una escritura exageradamente adornada puede
ser símbolo de vanidad, mal gusto o de un complejo de inferioridad. La escritura
sencilla, sobria, indica moderación, equilibrio, realismo, autocontrol. También
mediante la grafología se pueden encontrar signos que hacen sospechar que una
persona padece un trastorno psicopatológico del tipo de la esquizofrenia, la
depresión o una demencia orgánica.
La firma
tal vez sea el elemento de mayor valor dentro del estudio psicológico de la
escritura, ya que resume en parte un gran número de características que se
expresan a través de todo el escrito, y además se produce una mayor proyección
de la personalidad al tratarse de plasmar el propio nombre y de realizar una
rúbrica plenamente individualizada.