· Una infusión de consuelda es de gran utilidad para combatir la anemia, ya
que abre el apetito y, al mismo tiempo, proporciona al cuerpo diversos
elementos nutritivos gracias al elevado porcentaje de proteínas que posee
esta hierba.
· Para combatir
la inapetencia y, al mismo tiempo, facilitar las digestiones pesadas,
podemos prepararnos una excelente bebida si dejamos cincuenta gramos de
artemisa macerándose en un litro de buen vino tinto durante quince días.
Tomar una copita antes de las comidas.
· Si sufre usted
de falta de apetito nada mejor que tomar un zumo de manzana con unas
gotas de limón media hora antes de cada comida. Los ácidos naturales de
la manzana, además, favorecen la digestión y ayudan al organismo a
absorber el hierro de los alimentos.
· Cuando la
fiebre se apodera del organismo se tiene una intensa sensación de sed y
es necesario reponer los líquidos que se pierden con la sudoración. Para
ello no es recomendable tomar bebidas artificiales, ya que podemos
preparar este excelente refresco natural: se pone la cáscara lavada de
un limón en una jarra resistente al calor, junto con dos cucharadas de
cebada perlada. Se le echa encima un litro de agua hirviendo, se tapa y
se deja en reposo toda la noche. Al día siguiente se cuela y se endulza
al gusto.
· La fiebre deja
el cuerpo dolorido y desmadejado. Para aliviar estos síntomas existe una
combinación excelente: primero se fricciona suavemente el cuerpo del
enfermo con una loción obtenida al hervir durante tres minutos un manojo
de hojas frescas de borraja en un litro de agua; luego se le da un
masaje en la planta de los pies con una mezcla calmante de aceites
esenciales de tomillo, eucalipto, salvia y lavanda disueltos en un poco
de aceite de almendras.
· Una infusión de
escaramujo con té de hibisco, servida caliente o fría y con un poquito
de limón, está indicada para combatir las crisis febriles que a veces
padecen los niños.
· Para combatir
la fatiga crónica existe un remedio casero que era muy empleado
antiguamente: tomar antes de cada comida una copita de vino de canela,
que se elabora dejando macerar durante quince días treinta gramos de
canela ligeramente machacada en un litro de vino de buena calidad. Luego
se cuela y se guarda en una botella de cristal.
· La horchata o
jarabe de agua de cebada, es un remedio muy bueno para combatir la
desmineralización y cualquier fatiga anormal. Se llama así porque antaño
se elaboraba a base de cebada. En la actualidad, los fitoterapeutas
recomiendan que en su composición sólo entren almendras.
· Ante la
debilidad y el agotamiento, de un buen trago de zumo de remolacha, hojas
incluidas, mezclado a partes iguales con zumo de zanahoria. Beber medio
vaso tres veces al día.