|
LA MUJER Y EL TRABAJO REMUNERADO
La mujer simbólica es una chicana negra que habla con fluidez el chino; que
ha dado a luz 1,2 bebés (ni en el lugar adecuado ni con los debidos cuidados
infantiles); ha hecho un doctorado y, durante un decenio, enseñará inglés a
los alumnos de primero y blanqueará tu ropa con lágrimas, callada como un
huevo de porcelana. Tu departamento la encarga a un taxidermista y ella
llega lujosamente disecada rellena de plumas de ganso capaz de doblarse como
un saco de dormir o de arena.
Marge piercy: The Token Woman.
La mayoría de las mujeres norteamericanas trabaja fuera de casa. Entre los
18 y los 64 años, el 67% de las mujeres trabaja. Por tanto, la mujer que
trabaja fuera de casa no constituye una desviación de la norma, sino que la
constituye.
¿Por qué razón optan las mujeres por realizar trabajos remunerados o por no
hacerlo? Podemos establecer una distinción entre el proceso de elegir una
carrera y la decisión de trabajar fuera de casa.
Es probable que, en la elección de carrera, intervengan principalmente
variables psicológicas, ajustando los intereses y capacidades a los
requisitos de un trabajo concreto. En cambio, la decisión de trabajar fuera
de casa o no de una mujer adulta es, más bien, el producto de factores de
situación. Uno de ellos es económico. Si la mujer vive sin pareja, por regla
general tiene que trabajar para ganarse el sustento suyo y, quizá, de sus
hijos, si es progenitora única. En el caso de algunas mujeres casadas, la
decisión de trabajar fuera de casa está influida por el grado en que los
ingresos del marido sean suficientes para sustentar la familia.
También influyen las actitudes del cónyuge con respecto al trabajo de la
esposa. Un estudio descubrió que los niveles de las carreras de las esposas
en 1974 podrían haberse previsto a partir de la motivación de poder de sus
esposos, medida en 1960. En concreto, un nivel elevado de compromiso con la
carrera de la esposa estaba asociado con una baja motivación de poder de su
esposo. Los niños constituyen otro factor importante que influye en la
decisión de una mujer de acceder a una actividad laboral. Cuanto mayor sea
el número de hijos que tenga, menos probable será que ella trabaje fuera de
casa. No obstante, éste es un resultado correlacional, sin que de él pueda
inferirse la causalidad. De hecho, hay pruebas de que la influencia se
produce en sentido opuesto: la pertenencia a la población activa parece
reducir el número de hijos que la mujer desea y tiene. |