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Existencialismo y
lesbianismo
La filosofía existencial sostiene que todo el mundo puede cambiar su visión
de sí y su forma de ver el mundo en cualquier momento, alterando
profundamente, de ese modo, el curso de su vida; que los humanos son siempre
libres para reevaluar su propia condición y para emprender alguna acción
para modificarla. Las personas no tienen por qué apoyarse siempre en las
"muletas" de la ética, las expectativas sociales y las costumbres pasadas,
sino que pueden pensar por sí mismas y renegar de todo lo que hayan sido en
el pasado. El único lema es que los humanos deben ser auténticos y la
autenticidad exige que uno acepte toda la responsabilidad con respecto a sus
propias acciones.
La existencialista que más se ha ocupado del lesbianismo es Simone de
Beauvoir (1952). Ilustrando el tema existencialista, insiste en que la
verdad es que la homosexualidad (el lesbianismo) no es una perversión
deliberada a la que una se entrega, más que una maldición del destino. Es
una actitud escogida en una situación determinada, que es a la vez motivada
y libremente adoptada. No contempla la homosexualidad femenina como una
condición de vida compensatoria, sino como un caso de autorreevaluación y de
elección. Más aún, Beauvoir concuerda con la postura de Wolff respecto a que
todas las mujeres tienen un componente homosexual natural. Por tanto, desde
este punto de vista, el lesbianismo sólo es el reflejo de una elección
consciente y una disposición a aceptar la responsabilidad de tal elección.
La mujer que inicia una relación heterosexual participa en un contrato
social que la sociedad espera y refuerza. Parece que una mujer necesita una
fortaleza emocional y una convicción (autenticidad) mucho mayores, no
menores, para participar en una relación homosexual, arriesgándose al
rechazo social. Por tanto, de acuerdo con los existencialistas, en cierto
sentido la opción a favor del lesbianismo exige de la mujer una integración
personal mucho mayor.
El lenguaje del existencialismo se mantiene en el nivel de la opción
consciente y de la autenticidad, palabras difíciles de definir con
precisión. Para el psicólogo, constituye un lenguaje insatisfactorio porque
no proporciona una visión de la evolución ni del significado del
lesbianismo; en realidad, el existencialista rechaza |a idea de que la
elección homosexual de compañeros sexuales se base en experiencias previas,
insistiendo, en cambio, en que se trata de una cuestión de libre elección.
Por otra parte, la postura existencialista considera que el lesbianismo es
una forma de conducta legítima y normal. |
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